El verano ha llegado y tener tu vivienda equipada para sobrellevar mejor el calor es importante. A veces, resulta indispensable, dependiendo en qué ciudad vivas. En algunos casos, hay viviendas que, por su ubicación/orientación, son más frescas. Y también se agradece las que tienen una corriente natural de aire.

En este post vamos a repasar los diferentes tipos de aire acondicionado que podemos instalar para hacer más confortable nuestro hogar. Dependiendo de las necesidades de la persona y de la vivienda, podremos elegir unos u otros.

El aire acondicionado utiliza el proceso de la refrigeración, que consiste en producir frío, o mejor dicho, en extraer calor, ya que para producir frío lo que se hace es transportar calor de un lugar a otro. Así, el lugar al que se le sustrae calor se enfría. Generalmente, la refrigeración por aire acondicionado se produce mediante dos sistemas: refrigeración por compresión o refrigeración por absorción.

--Equipos portátiles sin unidad exterior, únicamente es necesario colocar el tubo de extracción en la ventana.

--Aire acondicionado split: un aparato compresor se ubica en el exterior conectado a equipos evaporadores en el interior.

--Aire acondicionado cassette: la unidad interior se instala empotrada en el techo. Se utiliza para espacios amplios como oficinas o locales comerciales ya que cuenta con más potencia que un split mural.

--Aire acondicionado conductos: se encastra en el falso techo del local o vivienda.  La distribución del aire frío es mediante conductos ocultos también en el falso techo que terminan en unas rejillas y generalmente regulables por donde sale el flujo del aire.

--Bomba de calor reversible: es un dispositivo termodinámico que coge el calor presente en un medio (por ejemplo el aire, el agua, la tierra) para transferirlo hacia otro de mayor nivel de temperatura (por ejemplo en un local para calentarlo.

--Equipos de tratamiento de aire: estos sistemas son capaces de modificar los niveles de humedad o concentración de toxinas del aire que se encuentra en un ambiente o estancia. 

Por todo ello, es necesario conocer las características del equipo a instalar y las necesidades de cada persona y vivienda para acertar en la elección.